Imitan piedra, hormigón, ladrillo, mármol y pizarra. Son originales y algunos tridimensionales
La cantidad de especies florales que existen de estos papeles es amplia, siendo las más demandadas, rosas, margaritas, lirios y girasoles
Como puedes ver, ahí afuera hay un fascinante mundo de papeles pintados esperándote
Se deben elegir basados en limpieza, diseños, colores y edades del niño, definiendo zonas de juegos, de estudio y de dormir o con diseños multiusos. Los de juego, brillantes y variados motivos
Son ecológicos y sustentables, diseñados con base en elementos naturales como bambú, yute, cáñamo, entre otros
Hay aspectos importantes a tomar en cuenta al elegir papeles pintados, entre ellos:
Por varias razones:
El efecto de pliegues puede ser vertical, diagonal u horizontal. Sus formas hechas deliberadamente irregulares, los hace únicos en su estilo.
Generalmente se empapelan una o dos paredes, en función de los muebles de la habitación. Usar tonos suaves que permitan relajarse
Es muy versátil, atractivo a la vista y se recomienda para paredes con imperfecciones. Viene con acabados en diversas texturas a escoger como pasta de vidrio, que le aporta brillo a la pared
Dan una apariencia de suntuosidad
Papel súper elegante y poco común
La paleta de colores es tan variada como lo permita la imaginación
Crea ambientes únicos y novedosos con papeles de efectos especiales, como reproducción de fachadas, figuras geométricas, bibliotecas cargadas de libros, motivos de caña de bambú, cuadros de pintura clásica, con animales, con efectos de espejo, brillo u óxido, hechos meticulosamente que parecen reales. Existen infinidad de diseños y colores.
En los años 50 se diseñaron papeles con estampados florales, orgánicos y diversos tonos tanto neutros como cálidos. Ya en los 60, con la moda hippie, se crearon modelos sugeridos por el Op Art., con colores luminosos y más llamativos. Aunque en los 70, aún seguía el movimiento hippie en Europa, surgió la era Flower Power, con diseños geométricos a gran escala y colores muy vivos.